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Porque me has hecho sufrir,
Rompiendo todo sobre mí,
Volviendo tus ojos ante mí ser,
Vuelves a hacerme creer.

Con poder puedes quebrarme la voz,
Y la vez decirme que no,
Puedo contar contigo para hablar de dolor
Se que siempre para mi estarás.

Con dolor me has enseñado,
Con dulzura me has levantado,
De golpes que solo yo puedo resistir,
Pues fueron hechos para mí.

Desdichas he pasado incluso al pensar,
Por un momento llegue a dudar,
Si existes, si estas a mi lado,
No me dejes volver a pensar,
Pues jamás sin ti podré lograr,
Mi felicidad que con dicha me has hecho amar.

Llorando te recuerdo en las noches,
Incluso con el adiós que me hiciste decir,
El cual hasta el momento no logro entender,
Pues para mí no debía de ser,
Pero es tu voluntad la que se hace,
Aquella que debemos seguir,
Pues eres mi padre, y mereces todo de mi,
Perdón si alguna vez, me olvide de ti.

En un mundo el cual se olvido de amar,
Eres tú mi camino, el que me hizo llorar,
Aquel que a veces con furia llego a reclamar,
Pues mi pequeña mente no puede pensar.

Siendo capaz de limpiar mi alma,
Siendo capaz de destruir mi amor,
Me das la oportunidad de pensar con calma,
Que libre seré, sin penas ni dolor.


Javier Soto





jueves, ‎11‎ de ‎octubre‎ de ‎2007, ‏‎18:27:28